27 mayo 2012

La justicia se cae a trozos

Deterioro y pocos medios. Desprendimientos, grietas, falta de estanterías o aires acondicionados sin reparar. El frustrado proyecto de la Ciudad de la Luz hace más necesaria que nunca una rehabilitación del Palacio de Justicia de Alicante. El desplome de 300 kilos de cornisa el jueves en una de las fachadas del edificio del Palacio de Justicia de Benalúa ha aumentado el malestar entre los funcionarios que trabajan en los juzgados de esta antigua cárcel, convertida hoy en día en sede del partido judicial de Alicante. El edificio no da más de sí por dentro y, a tenor del último derrumbe, tampoco por fuera. Técnicos de la Conselleria de Justicia ya han solicitado un presupuesto para revisar el estado de todas la voladuras del inmueble, mientras el Consell se ha comprometido ante sindicatos y ante el juez decano a rehabilitar el edificio el año que viene al igual que ya lo ha hecho con la Audiencia Provincial, donde se está pendiente de que en breve se inicien las obras tras ser paralizadas por no solicitar la conselleria de Justicia los permisos municipales pertinentes. Estas obras fueron anunciadas por el conseller Jorge Cabré después de que un incendio calcinara buena parte de la Sección Segunda de la Audiencia el pasado mes de enero. El derrumbe del trozo de cornisa ha puesto en evidencia los salientes del edificio por la oxidación que presentan los anclajes. Los marcos de las ventanas de la Fiscalía de Menores acaban de ser remodelads porque se cayeron cascotes. En el interior, miles de causas se apilan en ventanas, huecos de escalera y en rincones que no pueden ser habilitados para otros usos. Juzgados sin aire acondicionado, con goteras cuando hay fuertes lluvias, grietas y desconchados son sólo algunos detalles que ponen de manifiesto la necesidad de contar con unas instalaciones nuevas. Por las que habrá que luchar mucho, eso sí. Del proyecto de rehabilitación se ha informado en un momento de vacas flacas y sólo verbalmente, precisamente, para poder compensar la frustrada Ciudad de la Justicia, para la que está reservada un solar en la avenida de Aguilera tras el anuncio de su construcción hace más de diez años. El pasado viernes, los policías de la unidad de conducciones que se encargan del traslado de presos se encontraban trabajando con mascarillas en los calabozos del juzgado -aseguran que llevan así dos semanas- por el purulento olor de la letrina que sirve como inodoro a los presos que pasan a disposición del juzgado de guardia o que esperan para ir a juicio. Los calabozos no han tenido ninguna reforma en los últimos diez años y llevan sin fumigarse más de dos pese a que los protocolos de higiene obligan a ello, según fuentes del Palacio de Justicia. Un proyecto para 2013
El juez decano, Juan Carlos Cerón, asegura que el Consell le ha trasladado que ya se trabaja en los primeros estudios para tener un proyecto de reforma. Desde el sindicato CC OO, el delegado de Personal de Justicia, Jaime Martín de Hijas, también destaca ese compromiso al que llegó la conselleria en el último comité de seguridad laboral. "Se nos ha dicho que van a rehabilitar el edificio en 2013", afirma. Ahora bien. De Hijas alerta de los problemas de espacio que habrá para entonces cuando se tengan que desalojar los juzgados durante las obras. "Nos han dicho que habilitarán el patio para poner los juzgados mientras se acometen las reformas", añade. Se trata de un patio techado que da acceso a la sede de la Fiscalía y a otras dependencias como los despachos de los sindicatos, las instalaciones de Correos o las de mantenimiento. Por su parte, el representante del sector Justicia de Csif asegura que cualquier promesa de rehabilitación "ahora que no hay un duro" es "un brindis al sol". Mención aparte merecen las condiciones de la Fiscalía, ya de por sí con unas instalaciones repartidas entre la Audiencia Provincial y dos zonas alejadas dentro del Palacio de Justicia. El acceso a estas dependencias, que carecen de cualquier tipo de adaptación para personas discapacitadas, se hace por una única y angosta escalera, la misma que serviría para desalojar el área. Además de no existir salida de emergencia, la Fiscalía tiene problemas de espacio tanto para asentar a los fiscales (llegan a trabajar ocho en una misma sala, en la que a veces comparten ordenador) como para guardar causas. Un informe sobre el estado de las instalaciones remitido al Fiscal General del Estado en la última memoria de 2011 revela que hay tres fiscales que carecen de computadora. Asimismo, destaca que en una sala de 13 por 5 metros tienen sus mesas siete funcionarios más todos los armarios y estanterías que tienen que albergar los expedientes de todos los juzgados. Eso sí, los armarios y lejas son pocos. El suelo y los huecos de las ventanas sirven de balda para tanto papel. Un armario junto a los baños almacena cientos de causas y otro ubicado en un habitáculo sin ningún tipo de estanterías sirve de archivo de juicios de los años 2006 a 2009 . "Esto no es papel muerto, que es lo peor. Aquí hay veces que tenemos que buscar causas que van a apelación", señalan los funcionarios. El aire acondicionado y la calefacción son otro problema contra el que luchan. Solo el aire de la Fiscalía tiene más de 15 años, según los trabajadores, que en verano soportan altas temperaturas mientras que en invierno han llegado a trabajar a 15 grados.
Piezas de convicción Las piezas de convicción -objetos incautados que sirven de prueba en los juicios- se acumulan en cuartos sin estantes durante años y años haciendo que éstos habitáculos parezcan verdaderos trasteros. Fuente: Diario Informacion. 27 Mayo 2012

22 mayo 2012

Propuesta del CGPJ para reducir los Partidos Judiciales.

Reducir la cifra de partidos judiciales de los 431 actuales a menos de la mitad, entre 190 y 200, es la principal propuesta recogida en el documento aprobado por el Pleno del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), del que ahora se dará traslado al Ministerio de Justicia, y que contiene una serie de criterios básicos para la nueva demarcación judicial. Denuncia el Consejo “las disfunciones provocadas por un diseño territorial que ya no responde a la realidad” y que “la atención al ciudadano ya no puede medirse en kilómetros”, según explicó Gabriela Bravo, portavoz del CGPJ. Explicó que una de las claves para la mejora de la Justicia está en una mayor especialización judicial. A este respecto, señaló que “la fusión de partidos permitirá la separación de jurisdicciones de órganos que son los que tienen un trato más directo con el ciudadano, lo que facilitará una mayor agilidad en la tramitación de los procesos y permitirá una labor jurisdiccional más eficaz”. Para proceder a esta drástica reducción en el número de partidos, el CGPJ maneja una serie de principios básicos a los que deberá atender el nuevo diseño. Entre otros, apuntó Bravo, las circunscripciones resultantes “deberán tener una población superior a 100.000 habitantes y el desplazamiento desde los núcleos de población hasta la cabecera no podrá exceder de una hora a través de las vías de comunicación existentes”. Asimismo, el documento sostiene que los desplazamientos de los ciudadanos a los juzgados deberán reducirse a “supuestos estrictamente necesarios” utilizando, en la medida de lo posible, la comunicación telemática”. También explica el órgano de gobierno de los jueces en el documento aprobado ayer que la separación de los órdenes jurisdiccionales exige un mínimo de ocho juzgados “para garantizar un funcionamiento correcto de la Administración de Justicia. Finalmente, el CGPJ solicita que se atienda “a la necesidad de ruptura del vínculo juez/juzgado con la implantación de tribunales de instancia”, al tiempo que aboga por que se apueste por “una Justicia titular profesional con relegación de la Justicia interina a supuestos excepcionales”. Fuente: Boletín electrónico cgpe.es